Querida mamá:
Están locos estos romanos.
Salimos de la esquizofrenia del aeropuerto de San Juan de Puelto Lico tras pasar por la máquina de iones. Los que teníamos la desgracia de tener cuatro eses, SSSS, en la esquina inferior derecha de nuestra tarjeta de embarque tuvimos que pasar por la máquina de iones, la máquina que hace pfff y te echa un airecito que te da mucho asco y te ciscas en la madre que parió a Yorch doble uve.
Muchos del grupo no tuvieron que pasar por ahí pero Joaquín, Jimena, Míchel, Dalama y yo, entre otros, tuvimos que pasar por la máquina que hace pfff.
También nos tocó descalzarnos y ser tocados, toqueteados, sobados y resobados tanto nosotros como nuestros bultos y también nuestros bultos. Un auténtico coñazo!. Para más inri, al llegar al avión me dijeron que yo llevaba la tarjeta de embarque de otro pasajero y que me la habían dado equivocada. Y ese pasajero no tenía SSSS en su tarjeta de embarque...paciencia Peinch, paciencia...
Tras un vuelo de 45 minutos en American Airlines aterrizamos en Santo Domingo, República Dominicana.
Nuestra primera impresión fue de auténtica desolación. A Joaquín, Jimena y Cristina road-manager los sacaron por protocolo y a nosotros que nos den. No había nadie de la productora y nadie sabía nada. Doce idiotas en apuros.
En el exterior del aeropuerto buscamos a alguien que tuviera un cartelito que pusiera "Sabina" o algo así, pero na de na. Decidimos gestionar por nuestra cuenta un transporte al hotel cuando, tras media hora de espera, apareció un tipo diciendo que le siguiéramos. Las maletas debían viajar en un camión cuyo conductor dormía en el suelo junto a las ruedas, literalmente debajo del camión. Así empezó nuestro periplo por Santo Domingo.
Al día siguiente de nuestra llegada, primer chou y una extraña sensación: todo el mundo iba de tiros largos, las señoras como de boda o bodorrio, trajes largos y joyas o bisutería variada y los señores, o la mayoría de ellos, traje y corbata.
Aquí también se nos trata con mucha reverencia y parece que el público piensa "no vayamos a hacer mucho ruido gritando o aplaudiendo a ver si se van a enfadar..." y claro, más que enfadarnos, nos divertía la situación. Nos los queríamos comer con patatas y ellos terminaron por dejarse. Así que nos los zampamos. Estuvieron fantásticos pero muy respetuosos además de muy vestiditos.
La única señora que se desmadró un poquito era una que estaba de pie en la primera fila bailando y que iba vestida como Wilma Picapiedra. Antonio cuando la vio se me acercó y me dijo "mira, ahí está Wilma". Y claro, me moría de risa. Pues nuestra amiga Wilma animaba mucho el cotarro y se le agradece. Gracias Wilma por abrirnos la puerta.
Joaquín estuvo tocado de voz el primer día y mucho mejor el segundo. El primer día no hicimos ni "Camas vacías" ni "Resumiendo" pero el segundo día hicimos las dos. Al fin y al cabo, después del segundo día teníamos o tenemos tres días libres antes de volar a Panamá para después volar a México DF para después volar a Monterrey, todo esto el mismo día 27 de noviembre.
Así que estamos de vacaciones, zzz, zzzzzzz, zzzzzzzzzzzzzzz, y sé que seguramente a mucha gente le dará mucha envidia eso de tres días en Santo Domingo, isla caribeña y temperatura de treinta grados centígrados. Pero nada es lo que parece, la playa está bastante lejos, de día casi no se puede salir a pasear porque te fríes literalmente y hay algunas pegas más que no quiero reseñar porque tampoco es cuestión de hacerme el mártir, pero sí diré que nada es como parece y que estamos todos deseando que llegue el 27 para volar.
Yo, "idiota de él" pensaréis muchos, sigo mirando al mar todos los días a ver si veo a mis dos chicas y a Osito al otro lado. Sé que tengo el mejor trabajo del mundo, pero todos los días miro al mar.
Santo Domingo es una ciudad que da un poco de penita porque está bastante descuidada, está como descascarillada y ves constantemente gente en condiciones lamentables, niños pidiendo en cada esquina, perros famélicos, joder, no lo quiero poner muy negro pero de todos los países visitados hasta ahora, en este es en el que se nota más pobreza, más dejadez...pero qué piel tienen, cómo cantan, cómo bailan y qué cojones le echan a la vida! santo Domingo me ha recordado bastante a La Habana. Primas hermanas. Y la gente me dice "pues si has visto pobreza en Santo Domingo, vete al otro extremo de la isla y ya verás lo que es Haití!"
Y lo sé y pienso que soy un miserable por quejarme de que extraño gente y cosas...MARICONADAS!! no me dejéis, joder...
Bueno, más cosas. Joaqín y Jimena se han ido de vacaciones y nos veremos con ellos ya en Monterrey. En la gira ha estallado una bomba y no es la de confetti. De la bomba que acaba de estallar no es conveniente que os hable todavía. Ya os contaré en cuanto pueda hacerlo, pero algo, y es algo muy importante, va a cambiar o se puede decir que ya ha cambiado. CHAN CHAN CHAN CHAN...garantizo ríos de tinta corriendo por los foros sabineros tratando este tema...menos mal que ha llegado este pequeño parón para arreglar en lo posible este entuerto, esta dificultad que nos tiene a todos un poquito loos...CHAN CHAN CHAN CHAN...ese chan chan chan chan deberíais cantarlo como el principio de la 5ª de Beethoven, osea, con aire de suspense, CHAN CHAN CHAN CHAN...vamos a hacerlo todos junticos, a ver, un, dos, tres yyyyyyy CHAN CHAN CHAN CHAN!!!!!!!...oleeeeeeeeeeeeee, muy bien compañeras y compañeros, gracias, el karaoke y top colcha sigue funcionando!
Realmente no sé qué haría en este viaje y en esta gira sin el blog, sin la página, no podéis imaginar la vidilla que me da levantarme todos los días, duchita, desayunito y a la calle a buscar un ciber o similar donde conectarme y ver que si ayer había 15 comentarios hoy ya hay 18 y mañana habrá 35! me encantaría contestaros a todos uno por uno pero, como comprenderéis, es imposibl. Pero seguid, seguid, por favor, seguid escribiendo que paladeo cada comentario vuestro comosofueraestanochelaultimavez.
Ya os contaré más de estas mini vacaciones, de la bomba sin confetti y de nuestro viaje suplicio destino Monterrey. Por cierto, Monterrey es casa. Es una ciudad maravillosa que ya conozco y es como volver a casa. Sus habitantes se llaman "regiomontanos"...precioso, verdad?
Si veis un perrillo pequeño y blanco con la nariz totalmente pegada al suelo y con un trotecillo muy gracioso, es Osito que debe estar buscándome. Pobre.
Joder, me salió medio triste la croniquita y yo no quería...bueno, hay veces que es inevitable.
Guitarrista insurgente Varona.
PinchePanchogachupinchePanchogachupinchePanchogachupinchePanchogachupin....etc
Y diles que las echo de menos...